Cuando cocemos un huevo y lo pelamos, podemos ver claramente una telilla entre la cáscara y el propio huevo, se trata de la membrana del mismo.
Dicha membrana posee unas fantásticas propiedades, debido a su composición, ayudando a prevenir los procesos inflamatorios, bien sean por lesiones físicas o por enfermedades como la artritis.
Se ha descubierto que las membranas del huevo son capaces de disminuir el dolor y la inflamación, al mismo nivel que cualquier medicamento, por lo que constituye una opción natural y segura para enfermedades articulares.
Gracias a su composición, es una fuente de beneficios contra las enfermedades anteriormente mencionadas, entre sus componentes destacan la glucosamina, el ácido hialurónico, la condroitina y el colágeno.
A medida que envejecemos, estos elementos van disminuyendo y lo que conseguiremos con la membrana de huevo es precisamente combatir esa perdida.
con:
- Propiedades analgésicas.
- Para reducir el dolor.
- Propiedad antiinflamatoria.
- Reduciendo la inflamación.
- Propiedades regeneradoras.
- Recuperando los cartílagos
- Mejorando la flexibilidad articular
- Posee beneficios para nuestra piel: Dotándola de una mayor hidratación, reduciendo así las arrugas.
Por todo ello, se trata de un complemento alimenticio indicado para el alivio de la artrosis, o cualquier otra enfermedad articular, así como para la recuperación de lesiones deportivas.
Sin olvidarnos tampoco de los cuidados que nos ofrece a nivel de piel, pelo y uña.
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